La verdad es que ayer sobre las 12 de la noche mientras recibiía unas 13 llamadas para felicitarme me dí cuenta de lo mucho que ha cambiado mi vida en dos años.
Hace dos años hubiera salido a bailar hasta el amanecer a las fiestas de Rivas o en cualquier otro lado hoy sin embargo mi manera de celebrar mi cumpleaños va ser asistiendo a la III Marcha por la Visibilidad de las Personas con Diversidad Funcional.
Comiendo con dos grandes amigos, Luis Mi y Marta también relacionados con el mundo asociativo.
Ayer, no me fui de fiesta porque sabía que si me iba mi cuerpo no iba a resistir la III Marcha y quiero estar al 100% porqué es importante salir y manifestarnos hacer visible lo que a veces parece invisible y es que la diversidad funcional o discapacidad no puede permanecer oculta en la sombra.
Nosotros, podemos cambiar eso. Nosotros somos los únicos capacitados para esa tarea y debemos hacerlo.
La sociedad no es insensible si acaso ignorante en este tema. Somos nosotros, los que les debemos enseñar que el «mundo de la discapacidad» no es un mundo a parte sino parte del mundo real.
Ellos, cada vez están más dispuestos a escuchar.
¿Estamos nosotros dispuestos a alzar nuestras voces y a hacernos ver?
Sin duda, hoy celebraré mi cumpleaños de una forma muy especial.
